Las siguientes indicaciones te ayudarán a elegir correctamente la plastificadora de documentos que necesitas. ¡Toma nota! 

Formato de los documentos

Nuestra recomendación es elegir un modelo que sea capaz de plastificar documentos de tamaño A3 o tamaño A4 para, así, plastificar trabajos de todas las dimensiones inferiores. La mejor opción siempre será una plastificadora que pueda cubrir todos los formatos que necesitamos y también algún tamaño superior, que nos asegure poder realizar todos los trabajos que surjan.

 

Grosor de las fundas.

Las plastificadoras utilizan fundas que se miden en micras. Una micra es la milésima parte de un milímetro, es decir, 0,001mm.  La mayoría de las plastificadoras son compatibles con fundas de entre 2 x 75 micras y  2 x 250 micras, aunque tampoco es inusual encontrarnos con fundas de un grosor superior. Nuestra recomendación es optar por plastificadoras que puedan trabajar con fundas de 2 x 250 micras, para que así sean compatibles con grosores inferiores.

Es el caso de la plastificadora SH 650.

Frecuencia de uso.

La frecuencia de uso está relacionada con el tiempo de calentamiento. Si la frecuencia de uso es ocasional, el tiempo de calentamiento podría acercarse a los cinco minutos sin que el ritmo de trabajo se vea comprometido. Por otro lado, si la frecuencia de uso va a ser habitual, un tiempo de calentamiento adecuado rondaría entre 1 y 3 minutos.

 

Volumen de documentos a plastificar.

Debemos distinguir si tenemos un volumen alto o bajo de trabajo. Podemos considerar un volumen bajo de trabajo, si plastificamos menos de diez documentos aproximadamente por uso. En este caso velocidad de plastificado puede acercarse a los 60 segundos en un documento A4. Con un volumen alto de trabajo, más de diez documentos aproximadamente por uso, la mejor opción es una plastificadora que tarde unos 25 segundos en plastificar un documento A4.